En los últimos años se empezó a prestar mucha atención a la calidad de los alimentos y del agua que ingerimos a diario, por lo cual ha cobrado suma importancia el pintado interior de los tanques de agua potable eliminando impurezas que redundan en una mayor higiene.
Para este fin es indispensable el uso de productos aprobados por obras sanitarias de la Nación (AySA), lo que nos dará absoluta seguridad de que los solventes de la pintura no contaminarán el agua.
Es recomendable el uso de productos de base solvente pues son indicados para el sellado y la impermeabilización de tanques de mampostería o de fibrocemento ya que tienen gran adherencia sobre superficies limpias aún húmedas, fundamental en estos casos dónde se requiere rapidez, además son absolutamente insolubles en agua una vez aplicados.
Los tanques nuevos deben cepillarse para eliminar partículas sueltas y luego humedecerlos; en tanques antiguos es necesario eliminar perfectamente todo resto de sarro, musgo o pinturas anteriores y humedecerlos.
Debe aplicarse dos manos del producto puro a pincel o rodillo dejando secar por lo menos 4 horas entre ellas. Una mayor ventilación favorece el secado del producto. Se debe trabajar en recintos ventilados o con máscara pues los solventes del producto son perjudiciales.
Si el tanque presentase alguna grieta, puede cubrirse con sellador al solvente.
Es aconsejable lavar y enjuagar el tanque tratado con abundante agua antes de proceder a utilizarlo en forma corriente. El producto para pintar viene listo para usar, pero de ser necesario para favorecer su aplicación utilizar diluyente para caucho clorado, el cual puede usarse para limpiar las herramientas.
Elementos que necesitará: